La selección de Estados Unidos aprovecha la inmigración y doble nacionalidad para Qatar, tal como lo hizo en Francia en el Mundial de Rusia 2018.
A pesar de la gran cantidad de críticas que ha recibido de parte del país vecino, la selección de Estados Unidos se ilusiona con la vuelta a una Copa del Mundo, esto después de conseguir su boleto a la justa que se disputará en noviembre en Qatar.
Después de fracasar hace cuatro años, el modelo del país de las Barras y las Estrellas tuvo que cambiar, y lo hizo copiando el modelo que utilizaron algunas selecciones europeas, entre ellas la de Francia, la campeona del mundo en el certamen que se celebró en tierras rusas.
Cuando Francia se coronó campeón del mundo hace cuatro años, 16 de los 23 futbolistas que formaban parte de la convocatoria de Didier Deschamps venían de familias migrantes, es decir, muchos de ellos tenían más de una nacionalidad, tal como ocurre ahora con nuestra selección nacional.
Las nacionalidades de los de Berhalter
La gran mayoría de los futbolistas de la selección de Estados Unidos poseen otra nacionalidad además de la estadounidense. Esto incluye a figuras como Christian Pulisic (Croacia), Giovanni Reyna (Argentina, Portugal e Inglaterra), Ricardo Pepi (México), Jesús Ferreira (Colombia), Sergiño Dest (Países Bajos). Timothy Weah (Liberia y Francia), Yunus Musah (Ghana), entre otros.
A pesar de ello, de la última convocatoria de Gregg Berhalter, seis futbolistas no nacieron en Estados Unidos. Este es el caso de Giovanni Reyna, Antonee Robinson y Cameron Carter Vickers (Reino Unido), así como de George Bello (Nigeria), Malik Tillman (Alemania) y Jesús Ferreira (Colombia).
Ese mismo modelo lo está intentando copiar la selección mexicana, esto a pesar de no ser del agrado de los aficionados. Julian Araujo, David Ochoa, Marcelo Flores, Jonathan Gómez, Santiago Giménez, por mencionar a algunos jóvenes, son algunos de los mexicanos que tienen doble nacionalidad.
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