5) Escritor de Oro
Kobe Bryant siempre destacó su compromiso por superarse a sí mismo día a día, lo que lo llevó a encontrar una nueva pasión fuera del baloncesto en el cine y convertirse en un contador de historias.
“Dear Basketball” fue el título con el que el ganador de cinco anillos de NBA se estrenó como escritor para transmitirle al mundo a través de una carta su amor por el deporte por más de 20 años, anteponiendo los sacrificios y las lecciones de vida que este le dejó.
Gracias a ello, la Academia le otorgó el premio Oscar al mejor cortometraje animado en 2018, dejando en el recuerdo que “Como jugadores de basquetbol se supone que debemos callarnos y driblar, pero me alegra saber que hicimos más que eso”.
4) Un duelo para la historia
Uno de los recuerdos más memorables en no solo en la trayectoria de Kobe Bryant, sino en la historia de la NBA, fue el duelo ante el considerado el mejor de todos los tiempos y su máximo ídolo, Michael Jordan. Aquel lejano 17 de diciembre de 1996 quedará marcado como la entrega de la batuta al nuevo heredero.
Si bien en ese encuentro entre los Chicago Bulls y los Lakers, quedó de manifiesto el dominio de Jordan en la duela siendo el reinante MVP y el campeón de la liga con una dinastía inigualable. El novato de Philadelphia, que apenas sumó cinco puntos en 10 minutos, aprovechó el escenario del United Center para tomar nota de la clase impartida por el propio Michael, quien terminó cediéndole algunos consejos, sin imaginar en lo que terminaría construyendo.
3) Mamba Out
Con 39 años y dando cátedra de su incontenible talento en la duela, Bryant selló una de las noches más gloriosas en el último partido de su carrera en la temporada 2016, guiando a los Lakers a la agónica victoria de 101-96, en la que con 60 puntos se despidió en medio de aplausos y ovaciones.
Con el sello de la casa, firmó su retiro el 13 de abril de 2016 reviviendo todo lo que logró construir en el Staples Center (ahora Crypto Arena). 20 años se dicen fácil, pero ganarse el respeto de todos, solo unos cuantos. Nadie como Kobe.
2) Dinastía Bryant-O’Neal-Jackson
Los Chicago Bulls de Michael Jordan, Scottie Pippen y Dennis Rodman; los San Antonio Spurs de Tim Duncan, Tony Parker y Manu Ginóbili o los Boston Celtics de Bill Russel, perdurarán como algunas de las mejores dinastías, pero nadie puede olvidarse de la dinastía de Kobe Bryant y Shaquille O’Neal con un ganador como Phil Jackson al mando.
Con la llegada de Jackson a los Lakers en 1999, sin lugar a dudas, fue el punto de inflexión para el camino de ‘La Mamba Negra’, que junto a Shaq, se transformaron en una de las duplas más dominantes de la historia de la NBA al hacerse de tres anillos consecutivos del 2000 al 2002.
1) Un líder nato
El liderazgo de Kobe jamás se puso en duda, pero con la partida de O’Neal, los reflectores y la responsabilidad recayó en él para tomar a unos Lakers hambrientos de volver a conquistar un Trofeo Larry O’Brien. Ahora, lo haría de la mano de Pau Gasol.
Bryant y compañía regresaron a Las Finales en 2009 tras perder un año antes frente a su acérrimo rival, los Celtics, para repetir con otro bicampeonato y el quinto para él siendo nombrado como el MVP de ambos títulos, en lo que sería para él su última corona.
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