El jugador de los Pelicans sigue sin poder participar con el equipo y se descarta su presencia en el Play-in con New Orleans.
Zion Williamson no ve la luz al final del túnel. La historia se vuelve a repetir. Su calvario con las lesiones no hace más que agrandarse. 2 de enero. Fecha en la que el jugador de los New Orleans Pelicans disputó su último partido en la temporada. Más de tres meses después, aún no hay fecha de retorno.
Según ha podido informar Shams Charania, periodista de The Athletic, no se espera que el ala-pívot del equipo de Luisiana vuelva en los próximos días, por lo que su participación en el Play-in que disputarán la próxima semana, está más que descartada.
95 días después de haber pisado la cancha por última vez, su situación no parece ser optimista. El jugador, de 22 años, ya se perdió la pasada temporada entera por una lesión en el pie, y tan solo ha disputado 29 partidos de los 80 que han jugado los Pelicans esta campaña. Cabe destacar que, en su primer año, tras salir de Duke, solo se vistió de corto 24 veces.
Sus problemas con las lesiones se han convertido en una dinámica habitual que atesora un futuro negativo a la carrera de un jugador que estaba llamado a marcar una época, a cambiar la forma de ver el baloncesto y hacerse un nombre en la historia de la liga americana. Sus problemas de salud no han dejado ver su gran talento.
A pesar de su efímera participación en la competición, ya ha sido nombrado en dos ocasiones para el All-Star, habiendo jugado tres temporadas de las cuatro que ha estado en el baloncesto profesional, y tan solo un total de 114 duelos. Sus promedios esta temporada son de 26 puntos, 7 rebotes, 4,6 asistencias con un increíble 61% de acierto en tiros de campo.
A los Pelicans les ha costado coger un rumbo fijo sin él. El equipo de Luisiana tuvo que aguantar durante semanas sin su gran estrella y Brandon Ingram, la segunda espada que ha ido de menos a más. Precisamente el que fuera alero de los Lakers ha sido el responsable de que New Orleans retome el vuelo en el tramo más importante de la temporada.
Con todo ajustado en la parte media de la tabla en el Oeste, los de Willie Green han sabido impulsarse. 8-2 en los últimos diez encuentros y con promedios de 28,8 puntos, 6,3 rebotes, 8,7 asistencias y un 42% de acierto desde el triple de Ingram en ese tramo.
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