Higuita, el colombiano volador

Los que cíclicamente vaticinan el fin del mundo ya pueden empaquetar otro suceso extraordinario antes de que todo salte por los aires. Un colombiano peleando por la victoria en un esprint puro, de esos amplios, tras una rotonda que precede a una recta dotada de muchos kilómetros. Los ‘escarabajos’ cada día pertenecen más al olvido, ahora el ciclismo es una modalidad mucho menos especializada, más plural. Sergio salió muy joven del Manzana Postobón y llegó a tierras vascas casi descalzo. La Fundación Euskadi le apadrinó y siempre que puede destaca este magisterio. “Eskerrik asko” (muchas gracias), ha agradecido a su segunda casa tras cruzar la meta de Amorebieta con una superioridad insultante.

Tras una etapa rompepiernas, con muchos ‘muros’ como dice el propio Higuita, se quedaron 22 ciclistas para disputarse el triunfo en la llegada de Amorebieta. El colombiano salió algo retrasado de la última rotonda, pegado a las vallas de la izquierda. Tiró un esprint largo. Remontó con enorme potencia a cinco ciclistas que le precedían y levantó los brazos dejando de rueda a todos, con enorme ventaja sobre Bagnoli y Skjelmose. Hasta pudo echar un vistazo hacia atrás y levantar los brazos. El triunfo le mete en el Top 10 de la prueba. Hasta el último instante no tenía claro si correría la Itzulia porque andaba con problemas físicos. Se probó en el Gran Premio Miguel Indurain y peleó por el triunfo, aunque no logró su propósito, se quedó por detrás de Izaguirre con una espina clavada, que se saca hoy. Tiene una etapa en la Vuelta y la general de la Volta del año pasado. Otra jornada menos para que Vingegaard se proclame campeón, aunque Landa no arroja la toalla. Otro segundito ha arañado de bonificación el danés, y en los 13 que lleva sobre Mikel, diez han sido con las gratificaciones. Carapaz ha tenido que poner pie en tierra.

Todo sigue igual, aunque el día ha sido muy especial para dos hombres que pretendían ser héroes y se quedaron con el anonimato para la posteridad. Cavagna y Cattaneo, dos grandes ciclistas, se metieron entre pecho y espalda 140 kilómetros en solitario y llegaron a marcar 4:20 de ventaja. Parecían dos locomotoras humeando por Bizkaia. Hasta ahí les permitieron, con una media de 42 por hora. Burgaudeau intentó hacer de puente entre ellos y el pelotón, pero no llegó a conectar. El Jumbo del líder y el Jayco organizaron la caza. También se puso manos a la obra el Ineos algo más tarde. A 20 km para acabar, regresó el orden. Antes de enfilar hacia Autzagane, en un giro muy cerrado que implicaba subir casi en parado, atacó Mas con una potencia descomunal, con Vingegaard muy atento. Valter arropaba al amarillo de forma soberbia, como lleva haciendo en toda la vuelta. Landa no entró veloz y tuvo que rehacerse. Después atacó Chaves. De nuevo el líder sacó sus galones. En la bajada, muy rápida y técnica, se lanzó a tumba abierta Izaguirre. No había forma de buscar las cosquillas al jefe de la carrera, que hasta se pensó en buscar la tercera etapa seguida. Guerreiro andaba por medio y le molestó un tanto. El de Medellín le disipó la tentación con su pedaleo supersónico.

La carrera, como se esperaba, se decidirá mañana en la sexta y última etapa. La traca final con salida y llegada en Eibar, tradicional jornada definitiva de la Itzulia. Como es habitual en los últimos años, será un recorrido corto, de 137,8 km, y explosivo, lleno de repechos y subidas, puntuables o no. Esta vez son siete altos oficiales, aunque sin el final acostumbrado en Arrate. Pero sí se pasará por esta referencia del ciclismo vasco. Un total de dos veces, la primera por Krabelin (km.70; 5 kms al 9,6 por ciento de desnivel) y la segunda por Izua (km.111; 4,1 al 9,2), ambas catalogadas de Primera categoría. Aún hay otro alto de Primera, el de Azurki (5,1 al 7,4), que se subirá antes (km.24,9) y abrirá fuego en un recorrido en el que también se encuentran Elkorrieta (km.13,5), como aperitivo de Azurki; Gorla (km.45; 2ª, 9,6 al 5,7), antes e Krabelin; Trabakua (km.92,6; 3ª, 3,3 al 7,1), antes de Izua; y Urkaregi (km.125; 3ª, 5 al 4,8), previo a la llegada a Eibar tras su descenso de 5 km. Terreno suficiente para intentarlo todo y ver si Landa puede poner en apuros a Vingegaard o, como parece, el danés tirará de jerarquía y dejará claro por qué ganó el Tour de 2022 y aspira a prolongar ese reinado este año.

Higuita calificó de “especial” la victoria, ya que era la primera de la temporada y por los recuerdos de sus inicios en el ciclismo como ciclista de la Fundación Euskadi. “Ha sido una etapa muy dura, hemos ido a bloque para tratar de ganar la etapa. Sabíamos que el esprint era largo y muy rápido y tuve fuerzas para mantenerme delante. Hemos logrado una victoria muy importante, para mí y para el equipo”, señaló. A pesar de las dificultades en la subidas y de la dureza de una jornada disputada a todo ritmo, el colombiano aguantó entre los mejores en el esprint de Amorebieta y remató con éxito. “Creí que iba a reventar en cada ‘muro’, pero había que aprovechar esta oportunidad para ganar en la Itzulia. Victoria especial porque esta tierra me trae muchos y buenos recuerdos por mis inicios en la Fundación Euskadi”. El corredor de Medellín firmó la primera victoria de la temporada y se quitó la espina del segundo puesto en el reciente G.P Miguel Indurain. “Fui segundo, pero seguí concentrado para las siguientes carreras. Me he sacado la espina gracias a un gran trabajo de todo el equipo. Mañana la pelea va a ser muy dura, esta carrera es agónica y todos van a buscar sus objetivos”, vaticinó para la última etapa.

Clasificación de la quinta etapa

1. Sergio Higuita (COL/Bora-Hansgrohe) 03:59:57.

2. Andrea Bagioli (ITA/Soudal Quick-Step) m.t.

3. Mattias Skjelmose Jensen (DIN/Trek-Segafredo) m.t.

4. Matteo Sobrero (ITA/Team Jayco-AlUla) m.t.

5. Mauro Schmid (SUI/Soudal Quick-Step) m.t.

General

1. Jonas Vingegaard (DIN/Jumbo-Visma) 21:08:52.

2. Mikel Landa (ESP/Bahrain-Victorious) a 13.

3. David Gaudu (FRA/Groupama-FDJ) a 31.

4. Mattias Skjelmose Jensen (DIN/Trek-Segafredo) a 32.

5. Matteo Sobrero (ITA/Team Jayco AlUla) a 34.