“Si Honda no da una moto competitiva a Marc…”

Todavía encuentra limitaciones en su brazo, pero sabe que solo es cuestión de tiempo llegar a su máximo. Marc Márquez certifica que la cuarta operación fue todo un acierto, pero también es consciente de que tiene mucho trabajo por delante para llegar al cien por cien a los primeros test de temporada. Y su recuperación es una de las mayores clave para poder salir de la crisis que los del ‘ala dorada’ sufren desde el pasado 2020. Eso y que Honda haya dado los dos pasos adelante que le prometieron al ilerdense tras los test de Valencia, cuando el campeón no se fue con la mejor de las sensaciones. Se probaron varias cosas, pero los comentarios no fueron especialmente positivos.

Por eso, el invierno está siendo duro para la fábrica japonesa. Tienen que poner una moto competitiva en pista para las próximas pruebas. Un prototipo que dé a un renovado Marc Márquez la oportunidad de luchar por podios y victorias, pero también de presentar su candidatura a un título que no ganan desde el pasado 2019. El objetivo sigue siendo el mismo, porque para una marca histórica como Honda, el listón no puede ser más bajo. Lo será la presión ya que, de no cumplir con sus promesas, puede que su piloto estrella se deje querer por otras marcas de cara a 2024, último año de su contrato con HRC. La pelota está en su tejado y depende sólo de ellos poder darle a un campeón las herramientas que necesita.

Y de eso hablaba Giacomo Agostini en su última charla con La Gazzetta dello Sport. La leyenda viva de MotoGP sabe se lo que habla y es claro: Marc puede volver a imponerse, pero necesita la máxima implicación de su equipo. “Márquez me parece un gran piloto, agresivo, que nunca se rinde. Si Honda le da la moto adecuada, podría ser él quien gane a las Ducati. No obstante, si Honda no le da una moto competitiva… después de enamorarte te desenamoras y cambias de camino”, advierte el campeón italiano, ya con mucha “curiosidad por ver los test y las primeras carreras de 2023″. Aunque hasta el inicio del curso hay que esperar tres meses más, hasta el 26 de marzo en Portimao.

Dos gallos en Ducati

Hasta entonces solo queda recordar todo lo que 2022 ha dejado en MotoGP. Entre tanto, un nuevo campeón: Pecco Bagnaia, un piloto que, confiesa, le “gusta”. “Está un poco entre Valentino y yo. Rossi era muy ‘showman’, un personaje simpático y vivaracho. Pecco es todo lo contrario. Es tranquilo y serio. Yo me sitúo en un punto intermedio. Somos un buen trío, con nuestras diferencias, pero con la misma pasión”, confiesa sobre el piloto oficial de Ducati que, a partir de este año, tendrá un nuevo compañero en el box, Enea Bastianini. Y Giacomo ya advierte de las tensiones que esto podría generar en la fábrica: “Tener a dos gallos en el mismo corral siempre es complicado… Tu primer rival es tu compañero, pero a la postre tienes que ganar a todos si quieres ser campeón. Pero con un compañero fuerte no puedes aferrarte a excusas sobre si la moto es competitiva o no”.

Pero tampoco se olvida de un tercero en discordia: “Ducati cree en Jorge Martín y le ayudará en todo lo posible. El equipo Pramac lo tiene todo para ganar y está muy cerca del equipo de fábrica”. O de Aprilia, que ya sorprendió este 2022 y que, sin duda, dará de qué hablar el próximo curso si logran solventar los problemas de final de temporada. “Fue la sorpresa antes de tener problemas. Nadie esperaba ese comienzo. Aleix Espargaró se lució con algunas buenas carreras. Mientras que Maverick Viñales fue más irregular. Firmó grandes actuaciones, que luego alternó con otros días más discretos”, explica el italiano.